SAMU y su fundación están inmersos en un proceso de cambio enmarcado dentro de los objetivos recogidos en la Agenda 2030, dónde la internacionalización, el desarrollo, la investigación, la cooperación y la sostenibilidad son los principales protagonistas. Siguiendo esta línea, el departamento de Desarrollo Internacional de SAMU puso en marcha los trámites para formar parte de la European Social Network (ESN), un objetivo que alcanzó en febrero, cuando Fundación SAMU por fin se consolidó como parte de esta red de cooperación europea que trabaja y dirige conjuntamente a las más de 150 organizaciones procedentes de 34 países miembros que la integran hacia el desarrollo y la innovación en materia de servicios sociales.
Tal y como destacan desde el departamento, José Antonio Trujillo, adjunto a dirección general, fue el impulsor clave de este paso hacia la internacionalización de la entidad: “Desde el primer momento ha estado indicándonos el mejor camino a seguir en este nuevo terreno comunitario, buscando las mejores maneras de entrar de lleno en su tejido de empresas y personas”, aseguran.
En lo referente a los requisitos establecidos por la ESN para formar parte de su red, SAMU apenas encontró obstáculos para acceder a ella. La organización cuenta con más de 40 años de experiencia en diversos campos de actuación sociosanitaria que respaldan su compromiso con la acción social.
Tras su incorporación, Fundación SAMU ha iniciado esta nueva etapa como miembro de la ESN por todo lo alto. Actualmente, participa en diversos proyectos europeos. Uno de ellos se va a presentar para que se postule como candidato en los Premios Anuales de Servicios Sociales de la red, que serán entregados en Málaga en su próxima edición; y otro de ellos contará con la participación directa de la ESN. “Sin duda, el acompañamiento de esta entidad está siendo enriquecedor para nuestra Fundación y nos ayuda a acercarnos a nuestro objetivo de ayudar y de estar siempre al lado de las personas que más lo necesiten”, apuntan desde el departamento de Desarrollo.
Los objetivos de Fundación SAMU en su nueva condición como miembro de la ESN se enmarcan en dos horizontes temporales a corto y medio plazo, siendo el más inminente la creación de una red de contactos con los que poder estrechar relaciones y unir fuerzas. Y no solo eso, sino que también facilita un intercambio de ideas y conocimientos que “brinda la oportunidad de aprender a través de las experiencias compartidas de sus miembros”.
A medio plazo, la organización consolidará su posicionamiento internacional dentro del ámbito europeo. “Creemos que nuestra membresía va a aportar mucho a este objetivo al estar incluidos en una red de asociaciones nacionales de directores de servicios sociales: departamentos nacionales, regionales y locales de bienestar social en ministerios, regiones, condados, ciudades y municipios; universidades, escuelas nacionales o institutos de investigación aplicada que trabajen en la mejora de los servicios sociales y, por último, en organismos reguladores y de inspección”, destacan.
Digitalización y resiliencia
Fundación SAMU, representada por Borja González de Escalada, vicepresidente de la misma, e Isabel Dato, asesora técnica de proyectos del departamento de Desarrollo Internacional de la organización, participó en el congreso europeo organizado por la ESN sobre digitalización y resiliencia, dos aspectos clave en el desarrollo actual de los servicios sociales.
En él, los representantes de Fundación SAMU tuvieron la oportunidad de asistir a su primera reunión anual como miembros de la ESN, un hecho que les permitió conocer a los profesionales que conforman el equipo de trabajo de la organización al completo, así como a diversos miembros de la red de cooperación europea.
El congreso europeo de servicios sociales se celebró en Hamburgo (Alemania) del 8 al 10 de junio y contó con actividades, talleres y espacios de exposición orientados a nuevas herramientas digitales. Además, los representantes de Fundación SAMU en el congreso asistieron a diversas conferencias en las que se abordaron cuestiones clave como las soluciones innovadoras para una buena atención en el futuro, donde presentaron herramientas para mejorar la vida de trabajadores sociales y personas usuarias, cómo adoptar un enfoque basado en datos para ayudar a personas vulnerables y la creación de tecnologías y políticas en atención domiciliaria.
Por último, destacan también las zonas habilitadas por la organización del congreso para exponer información relativa a la innovación y los paneles temáticos disponibles entre sesiones que divulgaban contenidos caracterizados por una perspectiva más humana y sostenible.